CONVIVENCIAS 3º DE E.S.O.

Fuimos de convivencias a los Molinos. Nos dijeron el día anterior que teníamos que traer una autorización de los padres porque sino no podíamos salir y nos perderíamos un día muy especial con los amigos. También teníamos que traer:

APERITIVO
CAMARA
MP3

Y al día siguiente algunos trajeron las autorizaciones y entonces nos fuimos. Teníamos que estar en fila india como si fuera un colegio antiguo y sin hablar, bajamos por las escaleras camino al triángulo. Como éramos muchos cada tutor se llevaba a su grupo como una gallina con sus polluelos y cuando nos encontramos todos al lado del autobús y lo vimos tenía dos plantas. Nos quedamos asombrados y nos decía el tutor de turno: ¡vamos, vamos, que vamos a llegar tarde!. Entonces le hicimos caso y nos subimos pero primero había que dejar la mochila la dejamos y nos subimos. Yo iba sentada con un chico que se llama Jesús le encantan los aviones y se puso hacer con el apoya- brazos que era el acelerador y mientras, miraba los taxis porque creía que eran naves contrarias y tenía que quitárselas del medio. Yo era su copiloto y así hasta que llegamos a los Molinos. Allí me encontré a mis amigas y amigos: Sergio, Cristina, Laura, Sonsoles, Mar, Leticia y Guillermo. Y nos pusimos a hablar.

Las tutoras iban preguntando unas preguntas, también las decíamos en alto, y luego jugamos un poco y tomamos un aperitivo. Después jugamos a un juego muy divertido se llamaba la globa. Es un juego que nos atamos un globo en el pie y los otros nos lo explotan y a mí me lo explotaron por no saber agarrármelo al pie.

Luego rezamos un poco y luego nos quedamos un poco conversando hasta que el autobús viniera, entonces nos pusimos todos en una fila india y nos adentramos en el autobús y lo mismo: Jesús y yo jugamos a lo de las naves.
Y el final pusieron música para terminar todo Jesús cantaba. Detrás de nosotros no estaban Laura, Mar, Sonsoles y tenían un mp3. Les pedí si podía usarlo pero tenía una música que a mi no me gusta se llamaba Rebelde y se me quedó en el oído todo el día. En la puerta estaba mi madre esperándome, cómo no, con mi perro Inu .
Y así pasó todo el día
Me parece que ha sido muy divertido, menos cuando me explotó el globo.

Victoria Carriles.